Salgo a la calle con los bolsillos vacíos
y aun así tengo miedo
de que no sepan
robarme nada.
Es como nadar a contracorriente
y negarte a que te salven
sólo porque esperas
que lleguen
y te empapen aun más
o que se queden detrás de ti
mirando como no avanzas
pero consigues
que todo el mundo te mire
y se pregunte
qué coño estás haciendo
y por qué hay idiotas
secundándote la locura.
Hacer las cosas bien
siempre se me ha dado mal,
acabarlas
aun peor
pero me he dejado hacer
hasta en los malos momentos
caricias que sabía que cortarían
cuando llegara el frío,
que no el invierno.
He intentado,
hasta el final,
que el final nos encogiera el pecho
todos los días
un poquito
y que así entiendas
que no sólo fuimos llanto
si no puedes evitar odiarme
cuando humedezces otros cuerpos
con tu saliva
y compruebas que todos
te saben igual.
Yo, por mi parte
estoy contenta con los resultados
y aunque suene frío
hablar de lo nuestro
como de un experimento fallido,
-una probeta que explota en el último momento
y nos lleva por delante-,
sé que te he besado tan mal,
a veces,
que no vas a poder olvidarme
tan fácilmente.
Ya sabes que esa es mi manera de retar al tiempo.
A ver quién gana.
y aun así tengo miedo
de que no sepan
robarme nada.
Es como nadar a contracorriente
y negarte a que te salven
sólo porque esperas
que lleguen
y te empapen aun más
o que se queden detrás de ti
mirando como no avanzas
pero consigues
que todo el mundo te mire
y se pregunte
qué coño estás haciendo
y por qué hay idiotas
secundándote la locura.
Hacer las cosas bien
siempre se me ha dado mal,
acabarlas
aun peor
pero me he dejado hacer
hasta en los malos momentos
caricias que sabía que cortarían
cuando llegara el frío,
que no el invierno.
He intentado,
hasta el final,
que el final nos encogiera el pecho
todos los días
un poquito
y que así entiendas
que no sólo fuimos llanto
si no puedes evitar odiarme
cuando humedezces otros cuerpos
con tu saliva
y compruebas que todos
te saben igual.
Yo, por mi parte
estoy contenta con los resultados
y aunque suene frío
hablar de lo nuestro
como de un experimento fallido,
-una probeta que explota en el último momento
y nos lleva por delante-,
sé que te he besado tan mal,
a veces,
que no vas a poder olvidarme
tan fácilmente.
Ya sabes que esa es mi manera de retar al tiempo.
A ver quién gana.